jueves, 31 de enero de 2013

La amistad.

  Tal vez no maneje excelentemente el significado de amistad, pero poseo a grandes personas que me rodean día con día, esas personas a las que me refiero son mis amigas.
  
   Ahora no estoy muy cerca de mi mejor amiga, pues ella tuvo que estudiar en el estado de Hidalgo por cuestiones familiares, pero eso no nos impide seguirnos comunicando e incluso pronto iremos a un concierto de nuestro grupo favorito de música electrónica que se llama Swedish House Mafia.

    Mi mejor amiga se llama Angélica, y con ella hago locuras que nos divierten a las dos, ya que a veces nos bromeamos, platicamos, nos reímos a carcajadas si es posible, cada vez que nos vemos; quiero muchísimo a mi amiga porque es más que eso, podría decir que es mi hermana, tal vez no de sangre pero si de convivencia.

    Sé que en una amistad no todo es perfecto, pues en ella pueden existir conflictos, y valla que los hemos tenido, pero siempre los resolvemos porque no nos gusta estar peleadas.

     En fin, yo soy feliz con esta personita de la que acabo de escribir, pero no sólo ella es el núcleo de mi felicidad; también lo son mi familia y mi novio.

     Mi familia es divertida, aunque no siempre lo demuestre, pero mayormente reímos o salimos a distraernos a donde se nos sea posible y yo soy la encargada de tomar fotos, porque me gusta y quiero guardar esos recuerdos. Ellos son quienes me han dado la oportunidad de ser feliz a su lado, pues me protegen, me alimentan y más que eso me dieron la vida, no sólo en engendrarme, si no que también en verme crecer correctamente.

   

  

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